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Piometra canina síntomas de vaginitis

Hace un par de semanas, vimos de qué forma Uma se procuraba relamer de forma asidua su vagina. Cuando observamos qué podía ser, vimos que tenía la vagina coloradísima, cuando generalmente era toda blanca, con lo que decidimos asistir al veterinario. El diagnóstico: vaginitis. Ya sabéis que con la salud del can no se juega.

En la consulta nos preguntó qué observamos de la perra: cada cuánto se lamía, si hacía pipí muy seguido y poca cantidad o bien hacía pipí con normalidad, si observamos que supurara pus, etcétera Ahora observó la vagina, tanto por fuera como por la parte interior.

Lo único que observamos es que se lamía muy de en ocasiones mas con insistencia y que la vagina en lugar de blanca estaba roja. La veterinaria nos explicó que no veía que fuera una infección fundamental, mas del mismo modo le iba a hacer una citología para tomar muestras de las bacterias y hacer un cultivo. A los cinco minutos el cultivo dio positivo en infección, mas al no ser realmente violenta, no nos dio antibióticos. Nos recetó diez comprimidos de Therios para combatir la infección bacteriana, tres comprimidos de Prednisolona que no es más que cortisona y Vetericyn, que es un aerosol para duchas vaginales, de manera que la zona quede limpia.

Vaginitis en perras

Mas, para saber más sobre la vaginitis en perros, asistimos a la ayuda de nuestro amigo Adrián de Nuestro Leal Amigo, especialista en salud animal y esto es lo que nos contó sobre la vaginitis en perras.

Índice

¿Qué es la vaginitis en perras?

La vaginitis como su palabra señala se refiere a una inflamación de la vagina o bien vestíbulo vaginal. Se puede dar indiferentemente de si la perra está ovariohisterectomizada (esterilizada) como Uma o bien no.

Vaginitis perras

¿Qué causa la vaginitis en perras?

En la vagina de la perra, hay una vegetación bacteriana permanente, mas debido a ciertos factores externos, la vegetación normal de esa zona se puede desmandar dando sitio a este inconveniente. Ciertas causas pueden ser:

  • Periodos de agobio.
  • Entrada microorganismos desde el exterior (bacterias, hongos…)
  • Traumatismos.
  • Neoplasias.
  • Antibióticos.
  • Por consiguiente, muy frecuentemente la vaginitis es un síntoma o bien enfermedad secundaria a un inconveniente primario que no vemos.

¿Qué notaremos en la perra?

Se lame la zona genital en demasía.
Puede haber descarga vaginal (mucosa purulenta, sangrienta o bien una combinación de las dos).
La podemos apreciar más apática.
Aun puede presentar un tanto de fiebre en función de las dimensiones de la infección.

Síntomas de piometra en la perra

La piometra en perros aparece habitualmente en hembras mayores de 5 años, aunque puede aparecer a partir del primer celo. Se desarrolla en la fase de metaestro, es decir, las semanas siguientes al celo, cuando la concentración de progesterona es más elevada.

La paciente canina presentará secreciones vaginales sanguinolentas o purulentas en un 85% de los casos, coincidiendo con el periodo que va desde la segunda a la octava semana tras el celo. En este caso, cuando el cérvix permanece abierto, hablamos de piometra abierta. Pero también puede tratarse de una piometra cerrada y no haber descarga vaginal, en cuyo caso el pronóstico es más grave.

Los síntomas de la piometra canina incluyen fiebre, letargia, inapetencia, poliuria y polidipsia. Raramente también puede dar lugar a diarrea y agrandamiento abdominal. En casos muy avanzados o que no han recibido el tratamiento veterinario correcto puede llegar a producir septicemia, toxemia, peritonitis e insuficiencia renal.

Piometra canina recuperación

Puesto que la vaginitis habitúa a ser un inconveniente secundario, el veterinario debe descubrir cuál es la causa primaria que está causando este inconveniente y de esta manera también solucionar la vaginitis.
Para advertirla se realizará un cultivo vaginal específico en la medida en que, como os he comentado anteriormente, el inconveniente es que en la vagina hay una serie de flora bacteriana residente.
El tratamiento (a elección del veterinario conforme gravedad y animal) habitúa a ser antibiótico durante unos diez-15 días o la aplicación de duchas vaginales (esto último habitúa a desarrollar menos resistencias bacterianas).

Resumiendo, espero que este artículo os haya ayudado a identificar la vaginitis en caso de que vuestra perra la sufra alguna vez en su vida, y que asistáis al veterinario cuanto antes para poder ofrecer a nuestros pilosos la mejor calidad de vida posible.

Diagnóstico de piometra en perros

El diagnóstico de la piometra se efectuará por anamnesis y exploración física, y va a ser confirmado a través de ecografía. Si esta prueba no resulta concluyente o bien se sospecha la presencia de masas tumorales en el útero que puedan imitar los síntomas de piometra, una analítica y citología pueden asistir a conseguir un diagnóstico terminante.

El resultado metódico de piometra va a mostrar signos de infección y en la citología vaginal se observará alta concentración de neutrófilos.

El tratamiento de elección en piometra canina es la cirugía. No obstante, pueden procurarse 2 abordajes diferentes en dependencia del estado de evolución de la enfermedad y de lo conservador que se quiera ser:

  • Ovariohisterectomía. La extirpación quirúrgica de útero y ovarios es la solución terapéutica más segura, y el tratamiento de elección en la mayoría de los casos. Asimismo debe valorarse la administración de una terapia de soporte, conforme el estado del animal: fluidoterapia, antibioticoterapia, calmantes.
  • Tratamiento médico, que incluye el lavado del útero, instalación de drenaje transcervical, antibioticoterapia y administración de prostaglandinas para acrecentar la contractilidad uterina. Este tratamiento puede efectuarse en casos leves, cuando se desee preservar la fecundidad del animal, si bien hay que tomar en consideración que no puede garantizarse que se sostenga la capacidad de gestar. Esta alternativa terapéutica solo debe administrarse en piometra abierta y tras una cautelosa valoración del paciente canino, jamás cuando el animal presenta toxemia.

Piometra canina postoperatorio

En el postoperatorio se debe controlar todos los signos que puedan haber en cuanto a la infección, debido a que una piometra avanzada puede ir a más causando una peritonitis.

Piometra canina precio

¿Sabes qué tarifas tiene tu veterinario? Probablemente no y es una cosa que te intranquiliza.

Los costes entre veterinarios pueden cambiar mucho y es imposible hallar un referente pues pocas veces las tarifas aparecen publicadas.

No cabe duda de que tratándose de un servicio es realmente difícil cotejar tarifas. Siempre y en toda circunstancia van a existir factores como la experiencia o bien la formación del que presta el servicio en el momento de fijar el costo.

No obstante, para tener un referente, hemos creído interesante publicar las últimas tarifas orientativas que publicó en dos mil nueve el Instituto de Veterinarios. Son tarifas ya bastante viejas, mas atendiendo a la competencia que existe entre veterinarios y a la situación de crisis que hemos vivido estos últimos años, consideramos que no ha habido grandes alteraciones.

Suelen rondar sobre los 325 euros para perras pequeñas, 370 euros en perras medianas, 405 grandes y 280 euros en gatas.

La mejor prevención es la esterilización

Aparece con una mayor frecuencia la piometra en perras cuando son mayores de cinco años, y asimismo cuando han recibido terapia hormonal con estrógenos o bien progestágenos. Sin embargo, todas y cada una de las perras maduras sexualmente son susceptibles a desarrollar piometra. Por este motivo, la mejor prevención es la esterilización temprana.