Aves del paraíso

Lleva por nombre ave del paraíso a las cuarenta y uno especies del orden Passeriformes y de la familia Paradisaeidae, la mayor parte originarias de Nueva Guinea. Son aves tropicales conocidas por la belleza y la espectacularidad de su plumaje. Aun el nombre es agradable al oído y múltiples artistas se han inspirado en el ave del paraíso para crear.En Nueva Guinea las plumas se usan para la indumentaria y los rituales de las tribus autóctonas, las que consideran al ave del paraíso un esencial referente de su cultura.Descripción del ave del paraíso
Las especies de ave del paraíso tienen una enorme diversidad física en lo que se refiere a colores, formas, tamaño y peso, mas todas tienen cuatro dedos no palmeados, tres cara adelante y 1 cara atrás.Normalmente, el ave del paraíso es pequeña y robusta. Mide entre quince y ciento diez centímetros y pesa más de cuatrocientos treinta gramos. Las hembras son más pequeñas y tienen un plumaje menos vistoso, debido a que es el género masculino el que se hace cargo de seducir a la hembra. Tiene alas redondeadas y en ciertos casos adaptadas para provocar sonidos conforme lo requiera el macho. La manera del pico puede ser curva, semirrecta, larga, corta, delgada o bien gruesa. La diversidad es bastante extensa.El plumaje asimismo depende de la especie mas tiende a ser sumamente atractivo. Los colores son iridiscentes y contrastantes. Los hay amarillos, verdes, azules, colorados, violetas, cobrizos y hasta negros. La cola es larguísima y adquiere muchas formas cuando está extendida. Por servirnos de un ejemplo, la cola del macho Sicklebill Negro puede llegar a medir hasta 1 metro, lo que transforma a esta especie en la más larga; y la cola del ave del paraíso de Wilson se tuerce a cada lado asemejando 2 jocosos rizos negros.En los ejemplares machos jóvenes, las plumas del cuerpo no se desarrollan totalmente hasta los siete años de edad y por lo tanto, son muy similares a las hembras. Esto evita que sean atacados por otras aves del paraíso o bien por predadores.

Su distribución está limitada solamente a Nueva Guinea, las islas circundantes y el sur de Australia, en Oceanía. Habita en las selvas tropicales y zonas húmedas.

El ave del paraíso es solitaria y muy territorial. Los machos usan la cola para probar superioridad ante hembras, jóvenes y otros machos. Es el caso del ave del paraíso de Raggi que se reúne junto sus semejantes en lugares de exhibición llamados leks, ubicados sobre las copas de los árboles. Una vez ahí danzan en perchas para enseñar sus plumas y probar quién es más enérgico y “talentoso”.

Su nutrición está basada en frutos y también insectos de menor tamaño, por ende es un ave omnívora. Existen especies que son principalmente frugívoras y otras que solo ingieren insectos. Asimismo se ha visto que ciertas capturan ranas, reptiles pequeños y polluelos de otras especies de animales.

El instante del cortejo entre las aves del paraíso es un evento. Mientras que las hembras observan, los machos danzan de rama en rama exhibiendo el plumaje. Entonces las hembras eligen al macho que pruebe dominar sobre el resto y este se aparea con la mayor parte de las hembras.

Una vez que el macho se aparea con una hembra se aparta de ella y busca otra para regresar a aparearse. De esta manera la hembra se queda sola para cuidar a los huevos y de los polluelos. Edifica su nido sobre las ramas de los árboles con musgo, plumas sueltas y ramitas, y se instala para incubar de dos a tres huevos si bien la mayor parte de las especies más grandes solo ponen 1 huevo.

El periodo de incubación dura entre dieciseis y veintidos días. Tras el primer mes de vida el polluelo ya tiene la capacidad suficiente para salir del nido y subsistir por su cuenta.

A lo largo del tiempo el ave del paraíso ha sido cazada para realizar objetos con las plumas o bien sencillamente para comerciar con ella. La humillación de su hábitat asimismo contribuye a poner en riesgo la población de aves del paraíso en Nueva Guinea, en la medida en que ciertas especies ya están en franco riesgo de extinción.

En tiempos actuales la caza es tolerada solo para las liturgias tribales de los nativos de Nueva Guinea y no es aprobada para otros fines.