El labrador retriever, primo lejano del golden retriever, es sin lugar a duda una de las razas más hermosas de perros que existen, además son muy dulces y dóciles, siendo unos compañeros fieles.
Le daremos algunos consejos de cómo cuidar de un perro labrador retriever para que crezca fuerte y sano, de este modo tendrá un fiel compañero a su lado.
Cómo cuidar un perro labrador retriever correctamente
- Juegue mucho con él: Los labradores son una raza muy juguetona y tienen bastante resistencia. Por eso va a tener que jugar mucho con él cuando es un cachorro durante sus dos primeros años de vida. Le encanta sobre todo perseguir cosas por su pasado de cazador.
- Tenga bastante paciencia: Esta raza es muy inteligente y dócil, sin embargo no soportan los gritos ni los maltratos. Por ello precisará de mucha paciencia. Si hace algo malo, lo mejor es dejarlo encerrado en una sala donde no haya nada para que entienda que ha hecho algo malo y después de unos 20 minutos vaya a buscarlo.
- Llévelo a jugar con otros perros: Al ser un perro tan activo y con gran resistencia, la mejor forma de conseguir que se canse es llevándolo a espacio donde haya otros perros para que juegue con ellos. Cuando sea un cachorro le darán un poco de miedo los perros grandes, así que intente que juegue con unos que no sean demasiado brutos.
- Dele paseos largos: Al labrador retriever no le bastará con pasear 15 minutos, sino que sus paseos tendrán que ser muy largos de alrededor 45 – 60 minutos. Si no requiere de tanto tiempo, una solución sencilla es buscar un espacio abierto y extenso donde tirarle una pelota, para que juegue allí con usted y con unas cuantas carreras se cansará. Pero según vaya creciendo precisará de más tiempo de juego.
- Puede hacer ejercicio con él: Si es una persona que practica footing, le viene bien para correr, ya que su resistencia le permitirá llevar su marcha. Pero al principio hágalo con cuidado para que el perro se vaya acostumbrando poco a poco.
- Cuidará muy bien de los niños: Es un perro muy paciente y soportará mucho las jugarretas de los niños, pero también es muy cariñoso, por lo que es ideal para cuidar a los niños cuando se los tiene que dejar un rato solos.
- Controle lo que le da de comer: Esta raza es muy glotona y se comerá todo lo que le dé, sea su comida o lo que encuentre por la calle. Esto hace que no sea raro que a medida que van creciendo se vuelvan más y más obesos. Por eso, intente darle solo de su comida y evitar las golosinas o comida humana, pues nunca dirá que no.
- Cuídelo bien: Es un perro que le gusta la compañía y estar siempre con la familia, no soporta la soledad y ni vivir aislado. Es bueno que lo acostumbre a que en ciertos momentos esté solo, pero también deberá saber que habrá momentos en los que requiera estar con su familia.
- Evite darle zapatillas: Aunque es bueno darle algo para que pueda morder, y de ese modo no muerda los muebles, es mejor no darle zapatillas o botellas de agua, porque interpretará que todo eso lo puede coger como un juguete.
- Llévelo anualmente al veterinario: Ya no solo por bañarlo o cortarle las uñas, sino también para que controlen que no coge ninguna enfermedad. Lo recomendable es que lo lleve al menos dos veces al año para que le hagan un chequeo completo.
- Vigile cuando lo saque a la calle: En su primer año de vida, esta raza suele coger todo lo que pillan por la calle y se lo comen. Debe vigilarlo bien, porque podría comerse algo que le sentase mal o se intoxicase.
- Cepillelo una vez al mes: Los labradores retriever mudan el pelo tres o cuatro veces al año, pero ello no implica que no suelten pelo el resto del tiempo. Por eso es aconsejable que al menos una vez al mes le pegue una pasada con el cepillo.
Colores de labrador retriever
Este perro se puede encontrar en tres colores distintos:
- Canela, que es de las más comunes de ver.
- Negro, otra variedad bastante común.
- Chocolate, es la variedad más rara de ver y se distingue fácilmente de sus hermanos. Sin embargo, es posible que en la noche le parezca negro.
No dude que cuidar de un labrador retriever tendrá su recompensa, pues se trata de un gran amigo y un excelente compañero que le dará muchos momentos de felicidad. Otra cosa buena que tiene, es que si está pensando en tener otro perro, no se llevará mal con él, ya que se trata de una raza muy amistosa.