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La anestesia en perros: nuestra experiencia

El empleo de la anestesia en perros se hace indispensable si tu cánido debe someterse a alguna operación quirúrgica, cosa que puede ser algo que pase con sencillez. Os podemos hablar de dos experiencias, por la cirugía en los ojos debido al prolapso que padeció del tercer párpado y por la esterilización. Mañana, no obstante, va a ser la tercera vez que pase por “quirófano”, esta vez para la extracción del colmillo que se partió (y de paso para una limpieza bucal).

Mas, ¿qué tan peligrosa es? ¿Cuál es el procedimiento?

Índice

Anestesia en perros, ¿exactamente en qué consiste?

La anestesia siempre y en toda circunstancia se precisa en cualquier cirugía: primero a fin de que el paciente no padezca ninguna molestia y, segundo, a fin de que los facultativos puedan trabajar de manera cómoda. No os engaño en el momento en que os digo que jamás me quedo apacible con el tema de la anestesia. He tenido muchos perros y todos han debido pasar alguna vez por este trance, y jamás ha pasado nada, mas esa sensación de intranquilidad siempre y en toda circunstancia me invade.

Síntomas de la anestesia en perros

Síntomas de la anestesia en perros

No sé si alguna vez habéis visto los efectos de la anestesia en un can tras una cirugía, cuando ya lúcida. Es desolador. Les baja tanto la temperatura que entre que están adormecidos, tienen un temblor encima que para qué exactamente, solos en una jaula… Lo pasan mal y peor de verlos allá. Mas doy fe que las auxiliares veterinarias los cuidan mucho. Están pendientes de que estén bien, los arropan con mantas, etcétera Una vez en casa, es muy normal que el can se halle confuso, mareado y con mucho frío. Lo propio es dejarle reposar en su cama, bien tapado y sin incordiarle. El veterinario te va a dar pautas sobre cuánto y en qué momento darle de comer y qué fármacos precisará.

Ya antes de la anestesia en perros

A fin de que no haya inconvenientes con el tema de la anestesia el día de la cirugía, el veterinario efectuará unos análisis preanestésicos que le van a ayudar a revisar si el cánido va a tener o bien no inconvenientes con exactamente la misma. Con el análisis de sangre el veterinario va a poder identificar si existe algún problemilla que haga que fuera preciso mudar la manera de dirigir la anestesia.

Antes de la anestesia

Con los análisis de sangre anteriores a la cirugía (generalmente se hacen el día ya antes de la operación) el veterinario verifica si todos y cada uno de los órganos marchan bien o bien si existe alguna afección. Así puede tratar a cada cánido de forma personalizada. Puede revisar si hay inconvenientes o bien no en riñones o bien hígado, observar el nivel de plaquetas en sangre o bien otros problemas de salud que hasta el momento ignorabas que pudiese tener tu cánido.

En el caso de Uma, si los análisis salen bien, la preocupación se reduce, pues hay razas de perros más frágiles para ser anestesiadas como las de morro ñato (carlinos, frenchis, bóxers, etcétera) por temas respiratorios, los galgos pues metabolizan de forma diferente determinados fármacos, las razas Toy por su pequeño tamaño, los perros obesos, los perros viejos de siete años, etcétera y en ninguno de estos casos se halla , por consiguiente, algo más apacibles sí respiramos.

Para los análisis de sangre es esencial que, como pasa con nosotros los humanos, el can vaya en ayunas. Lo normal es que en el instante que lo dejes en el centro veterinario, te olvides de él hasta el momento en que te llamen a fin de que vayas a recogerlo. Si la operación no es una operación difícil, lo normal es que dejes a tu can por la mañana y por la tarde ya puedas ir a recogerlo.

En la mayoría de casos, tras concertar cita se deja la mascota en el centro y hasta la tarde no llaman. ¡Ahora a mimar mucho a nuestra mascota! de esta forma va a olvidar pronto el mal trago por el que debe pasar.