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Los beneficios de la equitación

Los beneficios de la equitación

La equitación es una disciplina que se sale, en cierta medida, a lo que estamos acostumbrados, sobre todo porque es capaz de combinar el deporte con el arte, en una actividad en la que el jinete tiene la complicada misión de poner a prueba su destreza encima de un caballo. Los mejores resultados, como es lógico, llegan cuando se consigue crear un vínculo entre el deportista y el animal.

Aporta unos cuantos beneficios, tanto desde el punto de vista físico como psicológico. A continuación te ampliamos los motivos por los que se presenta como una actividad muy aconsejable.

Índice

Ejercicio físico y resistencia

La práctica de esta disciplina nos permitirá mantenernos en forma al tiempo que se tonifican varias partes del cuerpo como abdominales, glúteos, piernas, espalda o brazos. Nos resultará de gran ayuda para rendir a un gran nivel en otros deportes, ya que también ganaremos en resistencia.

Como en cualquier otra actividad física de cierta intensidad, el calentamiento resulta imprescindible antes de realizar el esfuerzo, mientras que al término del mismo habrá que efectuar ejercicios de estiramientos para mejorar la flexibilidad y reducir el riesgo de lesiones.

Mejora de la postura

La equitación nos ayudará a mejorar mucho nuestra postura, sobre todo porque al cabalgar es preciso ajustar la posición tanto de la espalda como de la cadera, lo que contribuye también a que la columna adopte una postura más natural.

Para ello es imprescindible disponer de un buen asiento. Además de mejorar la posición encima del caballo, también adoptaremos una postura más correcta al caminar, sentarse o llevar a cabo cualquier actividad. Merece la pena hacerse con sillas de montar a caballo de cierta calidad para que se desarrolle un óptimo desarrollo del equilibrio, ya que se requiere de un buen balance sobre los estribos para conseguir esa postura adecuada.

El material resulta esencial para conseguir los mejores resultados en la equitación. Además de la seguridad, también debe repararse en la comodidad. Entre otras cosas habrá que prestarle una cierta atención a elementos como las botas de montar a caballo o al casco.

Mejora de la coordinación motriz

El jinete o amazona debe ser capaz de guiar al caballo, de modificar la dirección y el ritmo, además de mantenerse en alerta ante imprevistos como la reacción del animal o los obstáculos que puedan surgirle. De ahí que la coordinación motriz sea uno de los puntos más beneficiosos que nos puede aportar este deporte.

El cuadrípedo se convierte prácticamente en una extensión del deportista, al que con un simple movimiento se le puede hacer cambiar de rumbo o velocidad. Con todo esto se volverán más precisas tanto la coordinación como las capacidades motrices.

Menos lesiones musculares

Encima del caballo hay que tratar de mantener un equilibrio y una postura adecuada que evite la aparición de lesiones.  En todo momento someteremos a algunas partes del cuerpo, como son la columna, brazos, cuello y piernas a una gran exigencia física, lo que contribuirá a potenciar los músculos de estas zonas.

A la larga esto nos ayudará a disminuir el riesgo de contracciones y molestias físicas.

Ganarás en concentración

Este deporte exige estar concentrado y en alerta en todo momento. El jinete y el caballo deben formar un equipo muy sólido que actúe como uno solo. El deportista debe velar por su seguridad, pero también por la del animal, permaneciendo siempre pendiente de todo lo que se le pueda cruzar por el camino o de un imprevisto.

Ganará en concentración, pero no solo cuando practique la equitación, también en su vida diaria, ya que se mostrará menos disperso.

Crea valores positivos

Esta actividad conseguirá que el deportista se vuelva más responsable, tanto con uno mismo como con el caballo. Pero también se crean una serie de valores que posiblemente no se adquieran en otras disciplinas, como son la protección con el entorno y el medio ambiente. Además destacan el desarrollo de otras facetas como la convivencia o la inteligencia.

Mejora de autoestima y confianza

La práctica de ejercicio regular contribuye a mejorar la salud y el aspecto físico de las personas. Son dos elementos esenciales para ganar en autoestima. Además, la posibilidad de domar al caballo, de ser capaces de que realice todo aquello que le solicitamos permitirá que ganemos en confianza y en seguridad.

Beneficios psicológicos

El simple hecho de mantener un vínculo con un animal puede resultar muy beneficioso para nuestras vidas. En el caso de los caballos, se utilizan con bastante frecuencia para llevar a cabo trabajos de rehabilitación y terapias en diferentes ámbitos de la psicología y pedagogía. Entre otras cosas se emplean con pacientes con déficit de atención, parálisis, hiperactividad, síndrome de Down o autismo.

Esto es posible gracias a que las actividades con estos animales ayudan al desarrollo de determinadas funcionalidades que estas personas no activan con tanta facilidad, como la paciencia, el equilibrio o la concentración.

Y al igual que cualquier deporte que precise de una exigencia física, también ayudará al deportista a mantenerse alejado del estrés, situaciones de ansiedad o problemas psicológicos.